jueves, 24 de enero de 2013

Somos movimiento

Ampliar el panorama implica volvernos insignificantes ante los ojos del mundo. Pasamos así a ocupar sólo una mínima porción de la creación volviendo a nuestras manos un tenue y silencioso movimiento, perseguidas por frágiles pupilas que predisponen el resultado de una acción que nació del más profundo deseo. 
Entonces caminamos, ya sin contar los pasos, sino más bien repasando las pisadas mentales, los motivos que forjaron nuestros hechos. Ya dejamos de aceptar la envoltura social que nos condiciona desde el origen biológico. Y así despertamos al ser, a esa capacidad indivisible que consecuentemente formará lo que conocemos como "comunidad". Nacida la misma, se volverá mutable empapada de un crisol de colores generado por la esencia de cada individuo. Ahora nos entendemos como parte que hace a un todo, derrocando a esa estructura que nos hace sistemáticamente a nosotros.
Es así como el mundo dejará de correr y optará por caminar. Los días serán más brillantes y las noches más intensas, el cielo vivirá en perpetua metamorfosis respondiendo al anhelo de cada corazón y nuestros pasos, mientras tanto, no estarán cansados sino plenos y dignos de ser sólo una semilla más, que no da vida, sino que resignifica el sentido de la misma.
Es que somos movimiento. Un fuerte soplo que, vivo de ideas, empuja y se va.

2 comentarios:

li dijo...

te adoro, me emociona leerte

NEGROSANTO dijo...

love you LU, pura inspiración para mis sentidos!